Narró Charly García que una vez, cuando ya estaba ciego, quiso ayudar a Jorge Luis Borges a tomar un ascensor de un edificio, lo tomo de brazo y le dijo "por acá esta el ascensor" y Borges le respondió "prefiero ir por la escalera… que esta completamente terminada".
(Por alguna razón, ajena a mi intención, los nombrados acá son todos argentinos).
Para los mortales comunes, usuarios del metro por ejemplo, o para los que a veces nos llevan a algún centro comercial.
Cada vez que me enfrento a una escalera, me acuerdo del gran texto de Julio Cortazar "Instrucciones para subir una escalera", y me digo, podría haber algo parecido, pero más práctico, para las escaleras mecánicas, que tanta inquietud me están provocando últimamente.
Estas recomendaciones formales para el uso de una escalera mecánica me han dado vueltas en la cabeza hace harto tiempo. Entre lo que encontré por ahí, en unas web de fabricantes de escaleras mecánicas y lo que me contó alguna vez mi hermano de la diferencia que había en el uso de estos aparatos entre Europa y aquí en Chile, me puse a escribir lo que me parece debería haber como recomendaciones ¿Por que sería tan difícil que la gente las pusiera en practica?
Es realmente molesto que alguien te empuje a la entrada de una escalera (no voy a mencionar lo de los vagones de metro!), como si con eso ganara unos segundos más, en su frenética carrera a la pega o donde sea que va, generalmente todos vamos apurados en la ciudad, también es molesto si la escalera está totalmente desocupada y una pareja ocupa la totalidad del ancho de la escalera y no te deja pasar si tu quieres caminar.
No creo que se trate de reglamentar todo, pero resulta que vivimos en una ciudad todos juntos y establecer normas pequeñas, que no sean un estorbo como tal, nos ayudaría a pasarla mejor, a lo mejor se logra que la gente ría algo en la calle, en la micro, en el cine, en el metro y no mantenga la cara de perro por siempre.
Escaleras mecánicas - Como hacerlo bien.
- Cuando suba o baje por una escalera mecánica, sitúese a la derecha de ésta para que así, quien quiera caminar pueda hacerlo por la izquierda.
- Guarde un peldaño de distancia con el anterior.
- Si va en pareja o más, puede ponerse en fila india en la derecha, naturalmente puede obviar la norma anterior sobre la distancia, igual van a poder conversar.
- Sorprendentemente, en las escaleras mecánicas suceden accidentes. Para evitarlos:
* Nunca sube o baje corriendo
* Guarde peldaños de distancia con la persona siguiente.
* Agárrese al pasamanos.
* Tenga cuidado si lleva objetos grandes o ropa que se pueda enganchar.
Con eso me parece suficiente ….
Ahora como broche de oro, el texto de Cortazar me mencione, que lo disfruten:
Instrucciones para subir una escalera
Julio Cortazar.
Nadie habrá dejado de observar que con frecuencia el suelo se pliega de manera tal que una parte sube en ángulo recto con el plano del suelo, y luego la parte siguiente se coloca paralela a este plano, para dar paso a una nueva perpendicular, conducta que se repite en espiral o en línea quebrada hasta alturas sumamente variables. Agachándose y poniendo la mano izquierda en una de las partes verticales, y la derecha en la horizontal correspondiente, se está en posesión momentánea de un peldaño o escalón. Cada uno de estos peldaños, formados como se ve por dos elementos, se situó un tanto más arriba y adelante que el anterior, principio que da sentido a la escalera, ya que cualquiera otra combinación producirá formas quizá más bellas o pintorescas, pero incapaces de trasladar de una planta baja a un primer piso.
Las escaleras se suben de frente, pues hacia atrás o de costado resultan particularmente incómodas. La actitud natural consiste en mantenerse de pie, los brazos colgando sin esfuerzo, la cabeza erguida aunque no tanto que los ojos dejen de ver los peldaños inmediatamente superiores al que se pisa, y respirando lenta y regularmente. Para subir una escalera se comienza por levantar esa parte del cuerpo situada a la derecha abajo, envuelta casi siempre en cuero o gamuza, y que salvo excepciones cabe exactamente en el escalón. Puesta en el primer peldaño dicha parte, que para abreviar llamaremos pie, se recoge la parte equivalente de la izquierda (también llamada pie, pero que no ha de confundirse con el pie antes citado), y llevándola a la altura del pie, se le hace seguir hasta colocarla en el segundo peldaño, con lo cual en éste descansará el pie, y en el primero descansará el pie. (Los primeros peldaños son siempre los más difíciles, hasta adquirir la coordinación necesaria. La coincidencia de nombre entre el pie y el pie hace difícil la explicación. Cuídese especialmente de no levantar al mismo tiempo el pie y el pie).
Llegando en esta forma al segundo peldaño, basta repetir alternadamente los movimientos hasta encontrarse con el final de la escalera. Se sale de ella fácilmente, con un ligero golpe de talón que la fija en su sitio, del que no se moverá hasta el momento del descenso.
